Abogados de familia en Córdoba

Siempre que sea posible, recomendamos un divorcio de mutuo acuerdo: es más rápido, menos costoso y reduce significativamente el impacto emocional en los hijos. Este procedimiento simplificado permite a las partes llegar a consensos sobre aspectos clave como custodia, pensiones y reparto de bienes sin necesidad de un juicio.

Sin embargo, cuando el desacuerdo es profundo en aspectos fundamentales como custodia, vivienda familiar o pensiones compensatorias, un divorcio contencioso bien planteado puede ser la única manera de proteger tus derechos legítimos. En estos casos, contar con asesoramiento especializado es crucial para garantizar que tus intereses y los de tus hijos queden adecuadamente protegidos durante todo el proceso judicial.

La duración de un procedimiento de familia en Córdoba varía significativamente dependiendo del juzgado asignado y del tipo específico de procedimiento. Un divorcio de mutuo acuerdo, al ser un trámite más simplificado, puede resolverse en aproximadamente dos o tres meses desde la presentación de la demanda, siempre que no existan complicaciones adicionales en el convenio regulador.

Por el contrario, un procedimiento contencioso que requiera la práctica de pruebas complejas, periciales psicológicas, valoraciones de bienes o testificales puede prolongarse considerablemente, pudiendo alcanzar hasta doce meses o más en casos particularmente complejos. La carga de trabajo de los juzgados de familia de Córdoba también influye en estos plazos, existiendo variaciones entre los diferentes partidos judiciales de la provincia.

Sí, es perfectamente posible solicitar la modificación de medidas sobre custodia o pensión de alimentos cuando se produce un cambio sustancial, estable y relevante en las circunstancias que existían cuando se adoptaron las medidas iniciales. Esta modificación puede solicitarse tanto para aumentar como para disminuir las cantidades establecidas, siempre que exista una justificación objetiva que lo avale.

Algunos ejemplos de cambios que pueden motivar una modificación incluyen: pérdida de empleo, cambio significativo de ingresos, modificación de las necesidades de los hijos por edad o circunstancias especiales, cambio de residencia, alteración de las necesidades educativas o de salud, o cualquier otra circunstancia que afecte sustancialmente a la situación económica o familiar. Nuestro equipo estudiará detenidamente tu caso para valorar las posibilidades reales de éxito y te asesorará sobre la estrategia más adecuada.

Absolutamente sí. Trabajamos habitualmente mediante videollamada, teléfono y correo electrónico con clientes que residen en otros puntos de España o incluso en el extranjero, pero que tienen su procedimiento judicial en Córdoba. Nuestra metodología de trabajo está perfectamente adaptada para ofrecer un servicio completo y personalizado sin necesidad de desplazamientos innecesarios.

Solo será imprescindible tu presencia física en el juzgado cuando la ley así lo exija de manera taxativa, como en determinadas vistas o actos de conciliación. Para todo lo demás, disponemos de sistemas seguros de firma digital, comunicación fluida y constante, y protocolos establecidos que garantizan que recibirás el mismo nivel de atención y profesionalidad que si acudieras presencialmente a nuestro despacho. La distancia no será un obstáculo para la defensa eficaz de tus intereses.

Para iniciar un procedimiento de divorcio, necesitarás aportar documentación esencial que incluye: Libro de Familia o certificación literal de matrimonio, DNI o NIE de ambos cónyuges, certificados de empadronamiento actualizados, y documentación relativa a los hijos menores si los hubiere (partidas de nacimiento, documentación escolar o sanitaria relevante). Además, será necesario aportar la documentación económica completa: últimas declaraciones de la renta, nóminas, contratos de trabajo, escrituras de propiedades, contratos de arrendamiento y extractos bancarios.

En caso de divorcio de mutuo acuerdo, también se requerirá el Convenio Regulador firmado por ambas partes, donde se establecen todos los acuerdos alcanzados respecto a custodia, pensiones, uso de vivienda y reparto de bienes. Si el divorcio es contencioso, será fundamental aportar toda la documentación que justifique tus pretensiones. Nuestro equipo te proporcionará un listado personalizado de documentación necesaria según las particularidades de tu caso y te asistirá en la obtención de aquellos documentos que presenten mayor dificultad.

La determinación del régimen de custodia se establece siempre priorizando el interés superior del menor. Los tribunales valoran múltiples factores como la edad de los hijos, sus vínculos afectivos con cada progenitor, la aptitud de los padres para garantizar su bienestar, la situación familiar, laboral y económica de cada progenitor, el entorno sociofamiliar, y muy especialmente, la opinión de los menores cuando tienen suficiente juicio (normalmente a partir de los 12 años).

Existen diferentes modalidades de custodia: custodia exclusiva (a favor de uno de los progenitores), custodia compartida (ambos progenitores se alternan en el cuidado de los hijos) y custodia distributiva (cada progenitor tiene la custodia de algunos de los hijos). La tendencia actual de los tribunales es favorecer la custodia compartida cuando existen condiciones adecuadas, ya que se considera que mantiene el vínculo de los hijos con ambos progenitores. Sin embargo, cada caso es único y requiere un análisis pormenorizado de las circunstancias específicas para determinar el régimen más beneficioso para el desarrollo integral de los menores.